Desde sus humildes comienzos hasta convertirse en un ícono del automovilismo, BMW ha dejado una marca indeleble en el mundo de las carreras. En este artículo, exploramos la rica historia de BMW en el Motorsport y cómo su compromiso con la innovación y el rendimiento ha llevado a la marca a la cima del automovilismo mundial.
La participación de BMW en las carreras comenzó en la década de 1930. Uno de sus primeros logros importantes fue la victoria en la Mille Miglia en 1940 con el BMW 328, un vehículo que estableció un nuevo estándar en el diseño y la ingeniería automotriz.
Los años 60 y 70 vieron a BMW establecerse como una fuerza dominante en las carreras de turismo. Modelos legendarios como el BMW 2002 y el BMW 3.0 CSL conquistaron numerosas carreras, incluyendo el Campeonato Europeo de Turismos.
BMW siempre ha aspirado a llegar a las máximas categorías del automovilismo. En 1982, dio el salto a la Fórmula 1, suministrando motores al equipo Brabham. Su motor turbo, conocido por su potencia, ayudó a Nelson Piquet a ganar el Campeonato de Pilotos de 1983.
Después de una pausa, BMW regresó a la Fórmula 1 en 2000 como socio de Williams F1. Más tarde, en 2006, adquirió el equipo Sauber. Aunque su permanencia en la F1 fue corta, BMW dejó una huella con su enfoque ingenieril innovador. En años más recientes, la marca ha brillado en otras categorías como el DTM y las carreras de resistencia.
La constante evolución y participación en el Motorsport han permitido a BMW transferir tecnologías avanzadas de la pista a sus vehículos de producción. El rendimiento aerodinámico, la eficiencia del motor y la tracción a las cuatro ruedas son solo algunas de las innovaciones que nacieron de su experiencia en carreras.
El legado de BMW en el Motorsport no muestra signos de desaceleración. Con el compromiso de la marca hacia las nuevas tecnologías y la electrificación, el futuro se ve prometedor. Los equipos de BMW i Motorsport están llevando la marca al siguiente nivel en series como la Fórmula E, consolidando su posición como líderes en la carrera hacia un futuro más sostenible.
Desde la Mille Miglia hasta la Fórmula E, la historia de BMW en las carreras de automovilismo es un testimonio de su pasión y dedicación. Esta cronología de éxitos y desafíos define lo que BMW representa hoy: una combinación de tradición e innovación que sigue marcando el ritmo en el Motorsport.